¿Y éste qué hace acá?
Esta fue el increpante pregunta que Socio A les hizo a los Socios B y C de una empresa en la que me invitaron a participar como asesor externo de la Junta Directiva de su empresa.
Claramente había una visión diferente entre los socios… pero ese tema lo veremos después.
Para quienes aún a estas alturas no lo tengan claro, el rol del consejero estratégico en una junta directiva va más allá de ser un observador.
Este profesional aporta una visión externa y objetiva que es crucial para tomar decisiones informadas. En las juntas directivas, donde las decisiones pueden tener un impacto significativo en el futuro de la empresa, la perspectiva de un consejero puede marcar la diferencia entre el éxito y el estancamiento.
Por ejemplo, en una reunión para decidir sobre una expansión comercial, un consejero estratégico puede aportar datos de mercado, analizar riesgos y proponer alternativas que el equipo interno no haya considerado.
Además, este rol incluye moderar discusiones difíciles y facilitar que los directivos lleguen a un consenso alineado con la visión estratégica de la empresa.
El consejero también actúa como un puente entre los objetivos estratégicos y las operaciones diarias. Esto asegura que las decisiones tomadas en las juntas se implementen de manera efectiva, maximizando su impacto y asegurando el alineamiento en todos los niveles de la organización.
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